RESUMEN
INTRODUCCIÓN: La monitorización de antimicrobianos mediante sus concentraciones plasmáticas permite determinar la posología óptima de éstos, conducta esencial en pediatría. OBJETIVOS: Describir la monitorización de concentraciones plasmáticas de antimicrobianos y el ajuste de dosis en población pediátrica para determinar si las dosis utilizadas alcanzan rangos terapéuticos. PACIENTES Y MÉTODOS: Estudio descriptivo, retrospectivo, utilizando una base de datos con medición de concentraciones plasmáticas de amikacina y vancomicina en pacientes pediátricos del Hospital San Borja Arriarán, entre 2015-2018. Se determinó el número de pacientes que alcanzó rango terapéutico con dosis inicial, cuántos requirieron ajuste y sus características. RESULTADOS: Se monitorizó 104 concentraciones totales. Para vancomicina 65 concentraciones plasmáticas eran basales encontrándose fuera de rango terapéutico 56,5%; de los que requirieron ajuste, 25% fueron neonatos con mayor probabilidad de estar fuera de rango versus otros (p = 0,022). Para amikacina la Cpeak estuvo en rango en 60% de mediciones; 15,4% requirió ajuste incluyendo pacientes con fibrosis quística y oncológicos. No fue necesario efectuar ajustes en pacientes sin co-morbilidad. CONCLUSIÓN: La medición de concentraciones plasmáticas es necesaria para ajustar de forma individualizada la dosis, especialmente en pacientes pediátricos con fibrosis quística, oncológicos y en neonatología, donde es más probable no alcanzar rango terapéutico con las dosis iniciales.
BACKGROUND: The monitoring of antimicrobial therapy through plasma levels makes it possible to determine the optimal dosage of antimicrobials, an essential approach in pediatrics. AIM: To describe the monitoring of plasma antimicrobial levels and dose adjustment in the pediatric population to determine if the doses used reach therapeutic ranges. METHODS: Retrospective, descriptive study using a database with measurement of plasma levels of amikacin and vancomycin in pediatric patients at San Borja Arriarán Hospital between 2015-2018. The number of patients who reached the therapeutic range with the initial dose, how many required adjustment and their characteristics were determined. RESULTS: 104 total levels were monitored. For vancomycin 65 plasmatic levels were baseline, being outside the therapeutic range 56.5%; 25% of those requiring adjustment were neonates with a higher probability of being out of range versus others (p = 0.022). For amikacin, Cpeak was in range in 60% of measurements; 15.4% required adjustment, including patients with cystic fibrosis and cancer, without adjustments in patients without comorbidity. CONCLUSION: Measurement of plasma levels is necessary to individually adjust the dose, especially in pediatric patients with cystic fibrosis, oncology and in neonatology where it is more likely not to reach a therapeutic range with initial doses.